COMIDA ALEGRE

Hoy quiero hablar de mi afición a la cocina hace ya unos 15 años, sobre todo me gustaba hacer pizzas caseras. Las hacía todos los fines de semana aprovechando visitas familiares o de amigos. Nunca las hacia igual, le cambiaba los ingredientes, pero siempre me decían que les encantaban.

Yo me sentía feliz y agradecido. Muchas veces era el tema de conversación, porque me preguntaban la forma de hacerlas y yo les explicaba la forma y los trucos para que saliesen deliciosas. Y siempre les recomendaba que la comida casera es más saludable y gustosa. Y hasta alguna vez soñé que podría poner una pizzería.

Recuerdo que eran muy buenos momentos y me hacía sentir bien. Ahora cocino otros platos más saludables, otras recetas. Os animo a que aprendáis a cocinar porque además de aprovechar el tiempo y ocuparlo de forma positiva podéis comer de forma más saludable.



Autor A.G.J.          

 En el taller hemos podido hablar sobre nuestro Ocio, el tiempo libre, las barreras o excusas que ponemos para aprovechar el tiempo libre, algunos compañeros han propuesto actividades que van a iniciar próximamente y otros han comentado actividades que hacían en el pasado, y es que no podemos olvidar que para disfrutar, recuperarnos y tener ilusión hace falta hacer cosas en nuestro tiempo libre.

MI HISTORIA DE RECUPERACIÓN.

 

Era muy joven cuando una enfermedad truncó mi vida.

 

Mi talentosa carrera como dibujante se rompió en añicos, tantos como conexiones neuronales tenía. Solía disfrutar construyendo facciones certeras, hechas con gran destreza. Nada se me resistía: pastel, grafito, lápices acuarelables o ceras manley, que solían considerarse un trabajo de niños, pero que yo definía como el óleo del dibujo. Repentinamente todas esas cosas incluso en los pequeños detalles dejaron de interesarme.

 

En todos los años de lucha con la enfermedad no podía evitar mirar mis dibujos y sentir anhelo del trabajo bien hecho. Mi trazo se había vuelto oscuro y burdo. Había olvidado todo lo que aprendí. Por un tiempo me conforme con la destreza perdida, pensando que nunca volvería recuperarla.

 

---¡Maldita tarada! – solía pensar.

--- Ni tus manos te responden.

 

Llegué a tocar fondo y tal como pasan en estos casos ya no podía ir más que hacía arriba.

LA ENFERMEDAD ME HA AYUDADO A CAMBIAR MI VIDA

Hola a todos, soy una compañera de Motril que ha pasado por el Hospital de Día y quería comentaros mi experiencia con la enfermedad, una Depresión por la que he pasado y sigo pasando, y aunque tengo mis altibajos, me encuentro muchísimo mejor.

 

Yo pienso que todo en la vida tiene un porqué, mi enfermedad me ha hecho ver lo que me hacía sufrir, y esto lo he quitado de mi vida después de casi 17 años que he estado ciega perdiendo el tiempo con una mala influencia que me había quitado mi autoestima y las aganas de vivir, sintiéndome fea, gorda y un largo etc.

A mí, esta enfermedad me ha ayudado a valorarme como persona, a quererme y a subir mi autoestima, ahora tengo más amigos y conocidos que me quieren, tengo mi trabajo en el que me valoran y me quieren, como yo a ellos, somos una pequeña familia y estoy feliz.

A mis mis niñas les pido perdón porque han sufrido mucho, yo egoístamente sólo pensaba en mi dolor y gracias a Juan Carlos y Carolina que dieron con al “tecla” y me hicieron ver el dolor que causaba y el daño que les estaba haciendo. Ahora se que tengo unas hijas maravillosas que no se merecen sufrir y por las que vale la pena luchar.

No tengo palabras para agradecer al Hospital de Día toda la ayuda que me han dado y al cariño que les tengo al personal, a los cuales me gustaría nombrar:

IDA que siempre te recibe con una sonrisa y sus buenos días.

 

ROBERTO con su simpatía que no se puede tener más arte y elegancia jajajaja

 

ENCARNI con la que he pasado muchas horas muy bien haciendo yoga, piscina...le tengo mucho cariño.

 

LAURA para mí es una increíble profesional que disfruta de su trabajo y crea vínculos, gracias a ella he recuperado mi autoestima.

 

CAROLINA la pobre ha aguantado mis calentamientos de cabeza y ella siempre con una sonrisa.

 

ISEL increíble, es el alma de la fiesta, es una mujer que no para y está siempre la primera para todo, no hay otra como ella.

 

De todos me llevo un trocito, “os quiero mucho” y tenéis un trozo de mi corazón aunque suene cursi. De mis compañeros me llevo muchos amigos y amigas que espero lo sigan siendo muchos años, por citar a los que he tenido más trato: Antonio, yousuf, Juanjo, Elena, Tete…

Que os quiero millones a todos y gracias por devolverme las ganas de vivir y de luchar.

Autora: N.

 

 

Desde el grupo del taller decirte que has sido un ejemplo de alegría y constancia y que nos alegra que seas capaz de reconducir tu vida. Nos parece muy importante alejarnos de las cosas que nos hacen daño, de aquellas que no suman, y ser capaces de reconocer nuestros errores y de pasito a pasito ir avanzando. Un abrazo muy grande¡¡¡¡¡